Dos meses después de verse atrapada -a su pesar- en el escándalo del beso forzado de Luis Rubiales en su persona, la campeona del mundo española Jenni Hermoso fue convocada a la selección.
La campeona del mundo Jenni Hermoso regresó este lunes a los entrenamientos de la selección española por primera vez desde el asunto del beso forzado del expresidente de la Federación de Fútbol Luis Rubiales la noche de la coronación mundial de la Roja.
La jugadora de 33 años, que a su pesar se ha convertido en un símbolo de la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres, participó en un entrenamiento colectivo en Las Rozas, en las afueras de Madrid, entre aplausos de decenas de niñas que desafiaron el mal tiempo para presenciar el regreso de su estrella.
No llamado a filas durante el último armisticio
El número 10 de La Roja, que juega en Pachuca, en el campeonato mexicano, fue seleccionado por la nueva entrenadora Montse Tomé para los dos próximos partidos de la Liga de Naciones, el viernes en Italia y luego el 31 de octubre en Suiza.
Para sus dos primeros encuentros al frente de España, Montse Tomé decidió no convocarla, creyendo que era «la mejor manera de protegerla» mientras la federación española intentaba salir de la crisis. Esta elección fue criticada por varias jugadoras, empezando por Jenni Hermoso. “¿Protegerme de qué o de quién?”, se preguntó el exjugador del FC Barcelona y del Paris Saint-Germain.
El 20 de agosto, minutos después de la conquista del título mundial de La Roja en Sydney, Luis Rubiales la besó en la boca con sorpresa. Bajo presión, el ex hombre fuerte del fútbol español, que siempre afirmó que ese beso fue consentido, acabó dimitiendo. Acusado de «agresión» por la justicia española, no le permiten acercarse al jugador en un radio de 200 metros.
El escándalo de los besos forzados, que causó indignación internacional, también llevó a la Federación Española (RFEF) a despedir a varios de sus directivos, entre ellos el entrenador de la selección femenina Jorge Vilda, cercano a Luis Rubiales, sustituido por Montse Tomé.
Los jugadores, el Gobierno y la RFEF firmaron el lunes un compromiso para establecer un comité conjunto que dé seguimiento al acuerdo alcanzado para poner fin a la huelga de la mayoría de los campeones del mundo en septiembre. El texto promete a las futbolistas la continuación de los «cambios» en marcha y el inicio de «una era de diálogo», con el presidente interino de la RFEF Pedro Rocha asegurando que «intentó solucionarlo todo» y que «su puerta siempre quedará abierto’. Esté abierto a discutir cualquier tema”.
Artículos principales
«Infuriatingly humble coffee guru. Travel intern. Freelance zombie fanatic. Certified problem solver. Food scholar. Student.»