Publicado en : 13-07-2022 – 05:26

Después de que España y Portugal ya estén en medio de una ola de calor, Reino Unido y Francia -donde 1.000 hectáreas de bosque se han convertido en humo- se preparan a su vez para sufrir una segunda ola de calor en apenas un mes el miércoles 13 de julio.

La proliferación de estos fenómenos, según los científicos, es un resultado directo del cambio climático, con emisiones de gases de efecto invernadero aumentando en intensidad, duración y frecuencia.

La ola de calor que se ha asentado en Europa occidental «está afectando principalmente a España y Portugal, pero se espera que aumente y se expanda», dijo Clare Nullis, portavoz de la Organización Meteorológica Mundial, en Ginebra.

Advirtió de la situación crítica de «suelos muy, muy secos» y del impacto de las temperaturas en los glaciares de los Alpes: «Es una temporada muy mala para los glaciares», insistió, a poco más de una semana del hundimiento en Italia de un enorme bloque del Glaciar Marmolada, debilitado por el calentamiento global, matando a 11 personas.

Dos incendios en Francia

En Francia, dos incendios -favorecidos por el episodio de la ola de calor- incendiaron este martes 1.000 hectáreas de bosque en la región de Burdeos (suroeste). El principal destruyó 800 hectáreas de pinos cerca de Landiras, a unos 40 kilómetros de Burdeos, lo que provocó la evacuación de 150 personas, dijo la prefectura. Y cerca de la atracción turística Dune du Pilat, la más alta de Europa, situada en el Bassin d’Arcachon, otro incendio ha consumido unas 180 hectáreas de viejos pinos, según los bomberos.

La ola de calor en Francia debería durar al menos hasta principios de la próxima semana. A partir del miércoles, el mercurio subirá a 31 a 36 grados, localmente a 37/38 grados en el suroeste.

La primera ministra Elisabeth Borne instó al Gobierno a movilizarse ante el «impacto muy rápido» del calor «en la salud de la población, especialmente de los más vulnerables».

Guarda cada gota

Luego se espera que las altas temperaturas se extiendan a otras partes de Europa occidental o central.

En Reino Unido, la agencia meteorológica (Met Office) ha emitido un aviso naranja por ola de «calor extremo» a partir del domingo con temperaturas que pueden superar los 35 grados.

Las compañías de agua también han instado a los británicos a ahorrar cada gota, específicamente calentando solo la cantidad estrictamente necesaria para su taza de té.

Con el mercurio por encima de los 40°C, España y Portugal siguen asfixiándose. Impulsados ​​por estas temperaturas excepcionales y los fuertes vientos, los incendios forestales que habían azotado el centro de Portugal este fin de semana se reanudaron con fuerza el martes, evacuando varios pueblos y movilizando a más de mil bomberos.

El peligro de incendio ya había llevado a las autoridades a cerrar el muy turístico Parque Natural de Sintra, al oeste de Lisboa, mientras que las temperaturas subieron a 43,1 grados en el centro del país.

Más de 40°C en España

En España, las temperaturas volvieron a superar los 40°C en gran parte de la mitad occidental del país, especialmente en las zonas normalmente templadas.

Por ejemplo, según la agencia meteorológica (Aemet), se registraron 43,3°C en Córdoba (sur) y luego 43,5°C en Ribadavia (Galicia, noroeste). En Mérida (sureste) hizo lógicamente aún más calor: 43,9°C. Se espera que el pico de esta abrasadora ola dure hasta el jueves.

Favorecidos por estas temperaturas excepcionales, varios incendios asolaron el país, uno de los cuales ya había quemado 2.500 hectáreas de vegetación en Extremadura (oeste). Según el Gobierno, 70.354 hectáreas de bosque se quemaron en España entre el 1 de enero y el 3 de julio, casi el doble (+87%) de la media de los últimos diez años.

Con AFP