¿Cómo almacenar la energía eólica y solar para poder reinyectarla a las redes cuando ya no se cumplan las condiciones meteorológicas, como la insolación o el viento? El documental echa un vistazo entre bastidores a los laboratorios y start-ups que desarrollan las baterías del futuro.

Si bien es urgente «verdear» nuestra producción de electricidad abandonando los combustibles fósiles, sigue existiendo un gran obstáculo: la energía solar y eólica -y en menor medida la hidroeléctrica- se basan en los caprichos de la naturaleza impredecible. En condiciones climáticas óptimas, si se produce suficiente electricidad para saturar la red, debe consumirse inmediatamente, ya que aún no es posible almacenar de manera eficiente este excedente para recuperarlo en días sin viento o sin sol. Los investigadores llevan mucho tiempo trabajando en el tema crucial del almacenamiento y multiplicando propuestas innovadoras. ¿Podemos aplicar algunos de ellos a gran escala mañana?

esperanza y limites
En torno a este complejo pero fascinante desafío tecnológico, este documental ofrece un panorama de los caminos que los ingenieros de todo el mundo han explorado, sus aplicaciones y sus límites. Se presentan las técnicas más atrevidas, probadas a escala industrial o doméstica, desde los primeros éxitos de las energías renovables, como el bombeo de almacenamiento de las centrales hidroeléctricas, que ya se implantaban en el siglo XIX. Desde la nueva generación de baterías de iones de litio hasta el espectacular volante de inercia, pasando por electrolizadores individuales o condensadores de grafeno, estas propuestas despiertan tantas esperanzas como interrogantes. Sin lugar a dudas, el almacenamiento de energía será la piedra angular de una transición ecológica exitosa.