Según el experto en asuntos españoles, Abdelhamid Bajjouki, el hecho de que el rey Felipe VI encomiende la formación de Gobierno al líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, entra dentro de sus prerrogativas constitucionales. No esperábamos esta propuesta, las cifras no dan mayoría suficiente al líder del PP para ganarse la confianza del parlamento, precisa Bajjouki en una entrevista al diario Asabah Viernes 25 de agosto.

El rey Felipe, continúa”prefirió, en virtud de sus competencias definidas en el artículo 99, confiar la formación de gobierno al partido que encabezara las elecciones, como es tradición«.

Los partidos a nivel nacional, regional y local están expresando su apoyo a Pedro Sánchez, quien le devolvió un favor sugiriéndole que declarara una amnistía general. Una petición que es una de las dos demandas esenciales del Partido Republicano Catalán, subraya el mismo portavoz. Y Bajjouki para precisar que es seguro que Alberto Núñez Feijóo sólo tendrá la confianza como una sorpresa “llevada por el viento de la política”.

Según el experto y analista político citado por AsabahSi Feijoo no logra ganarse la confianza del parlamento, el rey se verá obligado a encargar a Pedro Sánchez la formación de gobierno. El Parlamento tendrá entonces dos meses para dar confianza al actual jefe de Gobierno. Si esto fracasa, el rey convocará nuevas elecciones, que podrían tener lugar en enero de 2024.

Bajjouki dijo sobre las relaciones marroquí-españolas: “Incluso si ocurre la sorpresa y Feijoo consigue la mayoría y forma gobierno, las relaciones marroquí-españolas no cambiarán. Es cierto que los partidos de derecha se habían reñido y criticado la gestión y toma de determinadas decisiones de Pedro Sánchez, pero sus dirigentes nunca criticaron la esencia de las decisiones políticas sobre las relaciones con Marruecos. Los intereses de España no permiten que la legislación española dé marcha atrás en el apoyo a la iniciativa marroquí de autonomía en el Sáhara, porque “El Estado profundo en España, cercano a Feijoo, no tolerará ninguna injerencia en sus intereses estratégicos con Marruecos«.