Como parte del sistema de residencia profesional, el Instituto General y Tecnológico Bagatelle acogió a una profesora de español, Carmen Gila.
Doctora en Bellas Artes y originaria de Andalucía, la profesora de arte en Madrid pudo observar las diferencias en el sistema escolar entre Francia y España.
Una de las más evidentes son los horarios: «los días son más largos, y aunque tengas más vacaciones, es interesante destacar que en España terminamos mucho antes».
También elogia la educación de los adolescentes, que es más respetuosa que en su país, así como el sistema de vigilancia: “En casa no hay CPE (orientador de educación vocacional) como aquí, ni supervisores, estos son los profesores que están obligados a supervisar en los pasillos, por ejemplo, hay menos control”.
Una estancia rica en experiencias de las que se benefició la profesora, que en el futuro podrá inspirarse en sus intercambios con sus homólogos franceses y en sus momentos de observación.
Los estudiantes también se beneficiaron de su presencia durante las clases de español que tomó.
El sistema ofrece a los profesores voluntarios la oportunidad de ir a instituciones extranjeras. Carmen Gila dice con satisfacción que está dispuesta a repetir la experiencia, pero para ello hay que esperar cinco años antes de poder marcharse.
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