DNIPROVSKE: En un cruce fronterizo cerrado desde hace mucho tiempo entre Ucrania y Bielorrusia, las tropas ucranianas esperan, pero Oleg, un guardia fronterizo, que sostiene Kalashnikov, dice que no vio señales de la presencia de los mercenarios de Wagner en el otro lado.

El ejército ucraniano dijo el jueves que estaba fortificando su frontera con Bielorrusia con trincheras y minas después de que el país anunciara la llegada a su territorio de soldados de Wagner tras su levantamiento abortado contra Moscú a finales de junio.

Según Oleg, de 26 años, no se ha observado ningún movimiento de tropas wagnerianas en esta parte de la frontera.

Pero Ucrania está lista para «rechazar» cualquier intento de incursión de las fuerzas rusas, incluido el grupo Wagner, dijo el soldado, que no dio su nombre.

“Dado que hemos sido apuñalados por la espalda desde Bielorrusia, no excluimos que pueda haber movimientos o despliegues de combatientes de Wagner en territorio bielorruso”, agregó. El 24 de febrero de 2022, fue a través del territorio de Bielorrusia que el ejército ruso se lanzó hacia Kiev al ingresar a la región de Chernihiv en Ucrania.

Minsk dijo esta semana que los combatientes de Wagner ahora están entrenando a las tropas bielorrusas cerca de Assipovichy, en el este del país.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, subrayó que Kiev está «siguiendo de cerca el desarrollo de la situación (…) y actualmente no hay amenazas importantes» para Ucrania.

«bajo control»

En la mañana de la invasión del 24 de febrero, los guardias fronterizos ucranianos volaron un puente sobre el río Dnipro, la frontera natural con Bielorrusia.

Las tropas rusas entraron en la región de Chernihiv ese día. Los intensos combates continuaron hasta la retirada de las tropas rusas en abril de 2022. Sin embargo, la región todavía es bombardeada regularmente.

En la frontera, los guardias fronterizos ucranianos dijeron que observaron a sus homólogos bielorrusos pero no les hablaron.

La situación en la frontera está «bajo control, tranquila, no estamos registrando ninguna provocación del lado bielorruso», dijo Oleg.

Dijo que las fuerzas ucranianas estiman que hay alrededor de 2.000 miembros del ejército regular ruso en territorio bielorruso, así como aviones y helicópteros.

«nervioso»

La calle principal del pueblo de Dniprovske tiene dos tiendas y una iglesia.

Viktor Koren, de 76 años, que fue allí a comprar queso, admitió estar «nervioso».

«Por supuesto que estoy nervioso. Porque está muy cerca. Hay un río cerca de nosotros, una frontera, y estos bastardos están del otro lado de la frontera», dijo, refiriéndose a los rusos.

En la tienda de comestibles donde almacena productos, Ilya Bobok, de 20 años, dice que confía en que Ucrania podrá resistir cualquier nuevo ataque.

«La primera vez ellos (los rusos) tenían el elemento sorpresa. Ahora no creo que vaya a funcionar. Tenemos gente experimentada. Chicos valientes. Creo que no hay nada que temer», dijo.

La propietaria de la tienda, Kateryna Bobok, de 37 años, confirma que «no hay señales de que algo haya cambiado». Pero ella sigue asombrada.

«Es aún más silencioso, es un poco inquietante», dice ella.