La histórica sequía que azota Cataluña seguirá agravándose por la falta de lluvias suficientes este otoño, advirtieron este martes las autoridades locales, sin descartar la posibilidad de que en el futuro se llegue agua en barco para abastecer la región.
“Este periodo es muy crítico”, dijo a la prensa David Mascort, responsable de acción climática en esta región del noreste de España. La actual sequía «es la peor en términos de duración e intensidad desde que comenzaron las estadísticas locales hace unos cien años», señaló.
Las precipitaciones están en su nivel más bajo en 36 meses en esta zona, donde viven casi 8 millones de personas y cuya capital es Barcelona, la segunda ciudad de España.
El nivel de los embalses, que almacenan agua de lluvia para su uso en los meses más secos, ha caído aún más y ahora está casi al 19% de su capacidad, frente a una media del 43,7% en toda España, según las estadísticas oficiales.
Las autoridades locales han llamado a la población a conservar agua, para retrasar la entrada en vigor de la ‘emergencia por sequía’, que provocaría ‘restricciones importantes’ en la distribución de agua, especialmente en el área metropolitana de Barcelona, subrayó David Mascort.
Mientras tanto, entrarán en vigor nuevas medidas, como reducir la distribución máxima de agua de 230 a 210 litros diarios y por habitante. Una decisión que no deja de ser simbólica, ya que el consumo medio de agua en España es de aproximadamente 130 litros diarios por persona.
Regar jardines y llenar piscinas está prohibido desde hace varios meses en Cataluña, donde también está restringido el uso del agua con fines industriales o agrícolas.
«Lo más importante es que todos nos demos cuenta de la urgencia de la situación en la que nos encontramos», afirmó Mascort.
A pesar de las restricciones y los llamamientos para ahorrar agua que ya existen, las autoridades locales creen que el umbral de emergencia podría entrar en vigor pronto.
En este contexto, el Gobierno regional llega incluso a plantearse llevar agua en barco a Barcelona si fuera necesario. «Si es necesario, lo haremos», aseguró este lunes el presidente regional, Pere Aragonès, en la televisión local.
España, país en primera línea del calentamiento global, vive desde 2021 un período excepcional de sequía, especialmente notable en Cataluña y el sur del país.
Según la agencia meteorológica, el país registró un déficit de precipitaciones del 12% a nivel nacional durante el año hidrológico que finalizó a finales de septiembre.
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