MADRID: Pedro Sánchez aseguró el viernes que Israel era “amigo de España”, un día después de que el Estado judío retirara a su embajador en el país tras los comentarios considerados “indignantes” por el primer ministro español sobre las operaciones militares de los israelíes en Gaza.

El español, una de las voces más críticas dentro de la UE hacia Israel, mantuvo no obstante su postura sobre el conflicto entre el Estado judío y Hamás, que provoca tensiones entre Madrid y el Gobierno de Benjamín Netanyahu desde hace varios días.

En un mensaje publicado sobre el actual miembro del Gabinete de Guerra, Benny Gantz.

«Una vez más condené los ataques terroristas de Hamás del 7 de octubre», prosiguió el presidente del Gobierno español, según quien «Israel tiene derecho a defenderse».

“Pero reafirmé que España considera intolerables las muertes de civiles en Gaza y que Israel debe respetar el derecho internacional humanitario”, concluyó.

Israel anunció el jueves que llama a su embajador en España «para consultas» tras unos comentarios considerados «indignantes» por el primer ministro español.

Este último había indicado en la televisión pública española que tenía «serias dudas» sobre el respeto por parte de Israel del derecho internacional, dado «el creciente número de personas que mueren, especialmente niños y niñas» en Gaza.

Las posiciones de Pedro Sánchez, que cree que el reconocimiento del Estado palestino redunda en “los intereses de Europa”, llevan varios días generando tensiones con el Gobierno de Netanyahu, que le acusa de “apoyar el terrorismo”.

La guerra entre Israel y Hamás fue provocada por el sangriento ataque del movimiento islamista palestino contra territorio israelí el 7 de octubre. Según Israel, en el ataque murieron 1.200 personas, en su mayoría civiles.

En represalia, Israel, que había prometido «destruir» a Hamás, bombardeó sin piedad la Franja de Gaza, por donde entró su ejército, antes del inicio de un alto el fuego el 24 de noviembre, que finalizó el viernes por la mañana. Según el gobierno de Hamás, más de 15.000 personas han muerto en la Franja de Gaza, entre ellas 6.150 menores de 18 años.